CIUDAD SIN SUEÑO (NOCTURNO DEL BROOKLYN BRIDGE)

No duerme nadie por el cielo. Nadie, nadie.
No duerme nadie.
Las criaturas de la luna huelen y rondan sus cabañas.
Vendrán las iguanas vivas a morder a los hombres que no sueñan
y el que huye con el corazón roto encontrará por las esquinas
al increíble cocodrilo quieto bajo la tierna protesta de los astros.
No duerme nadie por el mundo. Nadie, nadie.
No duerme nadie.
Hay un muerto en el cementerio más lejano
que se queja tres años
porque tiene un paisaje seco en la rodilla;
y el niño que enterraron esta mañana lloraba tanto
que hubo necesidad de llamar a los perros para que callase.
(Continua...)
Lorca escribió este poema en 1929-30 durante su estancia en la ciudad de Nueva York. El poeta quedó impresionado con la actividad frenética de la ciudad que no duerme y que prácticamente "ni a los muertos deja descansar". Usa a los animales en una actitud extraña para transmitir la intensa desnaturalización que sufren las ciudades modernas (Algo parecido a Matt Groening, dibujante de los Simpson, aficionado a dibujar ciervos que gruñen y delfines o ardillas asesinas) Bien, pues al parecer la cosa va de mal en peor. Pues no tenían bastante con los edificios y una amplia variedad de juegos geométricos, trigonométricos y formas minerales, ahora va y podan las copas de los árboles cuadradas, y es terrible porque esto perfectamente podría ser un verso añadido a la poesía de Lorca: "Las copas de los árboles están cuadradas" claro que para él sería una metáfora y nosotros nos hemos encargado de hacerlo literal, no me extrañaría que cualquier día vinieran las iguanas a mordernos si no soñamos.

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